Muchos de los hábitos que presentan los niños durante la infancia influyen en el crecimiento de su boca produciéndose problemas de maloclusión importantes en la edad adulta.

Uno de estos hábitos es la respiración oral. La mayoría de los niños que presentan este hábito es porque tienen algún problema nasal que impide una buena respiración a este nivel. Las características extraorales más típicas que poseen estos niños es que tienen la cara más alargada, las narinas cerradas, la boca siempre entreabierta, ojeras porque tienen problemas de sueño y labios agrietados y resecos.

Si crees que tu hijo puede tener algún habito que pueda perjudicar en su salud oral llévelo a su dentista. Siempre es mejor quitar el hábito a tiempo que después arreglar la maloclusión.